Volar en globo
La aventura de volar en globo es una actividad muy segura y dónde la sensación de vértigo no existe.
Quedaremos en un punto de encuentro acordado, que os confirmaremos un día antes del vuelo, en función de la previsión meteorológica y desde donde despegaremos tras la preparación del globo de la que podéis disfrutar. Comenzaremos preparando la barquilla y el quemador.
A continuación, extendemos la vela del globo en el suelo y comenzamos su inflado ayudándonos para ello de un ventilador de gran potencia, mientras sujetamos firmemente la boca de la vela para que entre el aire.
Cerramos la corona de la vela, y comenzamos a calentar el aire que hemos introducido dentro, con lo que la vela comenzará a elevarse. Una vez que la vela ya está completamente hinchada, ya tenemos preparada la aeronave para comenzar nuestro vuelo.

Vuelo libre
Después de una breve charla de seguridad, salimos a volar:
Ascenderemos tranquilamente. El globo flota en la dirección de los vientos del día, por lo que incluso para nosotros es una aventura, ya que sabemos desde donde hemos comenzado el vuelo, pero no sabemos realmente donde vamos a aterrizar.

Navegamos con la velocidad y dirección del viento.
El piloto, buscará las corrientes en las diferentes capas y alturas para navegar, siendo cada día diferente, por lo que, no hay dos vuelos iguales y por ello tu vuelo en globo será único.
Nuestro objetivo es volar aproximadamente una hora, pero dependiendo de las condiciones climatológicas y orográficas, puede variar la duración de la actividad.
Después de aterrizar, celebraremos el bautismo aéreo, que consiste en brindar con una copa de sidra espumosa, y disfrutaremos de un sabroso almuerzo campestre con lo que poner fin a un día memorable de vuelo.
Regresaremos en el vehículo de empresa al punto de despegue, el lugar donde iniciamos esta maravillosa aventura.
Vuelo cautivo
El vuelo cautivo consiste en la fijación del globo de aire caliente al suelo mediante unas cuerdas
Esto impide al globo salir volando. Lo hacemos subir y bajar hasta una determinada altura, entre 15 y 20 metros, pudiendo subir distintas personas en cada ascensión.
Esta modalidad se utiliza principalmente en eventos como festivales, conciertos, fiestas, promoción de una marca o producto, y por lo general tiene una gran expectativa por parte del público.
Los participantes podrán disfrutar de la sensación de elevarse dentro de una barquilla de mimbre mediante un globo de aire caliente.
Para la realización de un vuelo cautivo es necesario un espacio de 50 x 50 metros libres de cables y obstáculos.
Las mejores horas para realizarlo son a primera hora de la mañana o la última hora del atardecer e incluso por la noche, en cualquier época del año.
En el caso de los vuelos cautivos nocturnos la probabilidad de viento intenso es mucho menor. Para estas exhibiciones nocturnas el quemador cuenta con un dispositivo especial que ilumina el globo desde su interior como una gigantesca bombilla.
La exhibición tiene una duración de hora y media, pudiéndonos adaptar a las necesidades del cliente. Pídenos presupuesto.